Tensión a Puerta Cerrada


La incesante búsqueda de respuestas del padre había comenzado a desmoronar su matrimonio. Lo que empezó como una tensión silenciosa pronto escaló a palabras ásperas y discusiones nocturnas. Cada cena terminaba en desacuerdo, cada conversación conducía a la culpa.

“¿Por qué sigues persiguiendo esto?”, le espetó su esposa una tarde. “Porque algo no me cuadra”, respondió él. El amor, antes sin esfuerzo, se había transformado en desconfianza y distancia emocional. Su hogar ya no se sentía como un lugar de paz.

Advertisements
Advertisements