Después de 2 años de ausencia, un soldado palidece al oír a su hija decirle: “Mamá tiene un secreto”

Formando Parte de la Comunidad

Motivado por el apoyo que ya había recibido, Jamie decidió involucrarse aún más. Se unió a un grupo local de apoyo a veteranos, con la esperanza de dar y recibir ayuda de una manera significativa. En cada reunión, los miembros compartían historias, organizaban eventos y planeaban formas de apoyarse mutuamente en su transición de regreso a la vida cotidiana.

Jamie rápidamente se destacó como alguien confiable y compasivo. Se ofreció como voluntario para recaudaciones de fondos, ayudó a organizar actividades de fin de semana y se acercó a los recién llegados que parecían perdidos o indecisos. Este sentido de propósito le dio dirección a Jamie. También le permitió transmitir la amabilidad y el aliento que habían sido tan vitales para su propia curación.